Aceleran los tractores
La venta de tractores en el mercado interno fue de 1731 unidades en el primer cuatrimestre de 2013, al subir 70 por ciento respecto del mismo perÃÂodo del año anterior.
Así lo informaron entidades de fabricantes que precisaron además que fue el segundo mejor resultado de la década, superado por el pico de 2008. La expansión se explica a partir de dos frentes. El primero es el mejor desempeño de la cosecha, tras la fuerte sequía del campo en 2012. El segundo es el crédito barato para incorporar maquinaria agrícola. Eso es impulsado principalmente a través de las tasas subsidiadas del Banco Nación. Referentes estiman que el volumen de las ventas alcanzará 6000 unidades al cierre de 2013, para incrementarse cerca de 20 por ciento.
Las firmas AGCO, John Deere y CHN –agrupadas en la Asociación de Fábricas Argentinas de Tractores– vendieron 1360 tractores entre enero y abril. Esas empresas duplicaron los despachos respecto del mismo período del año anterior, para colocar en cuatro meses casi la mitad de las unidades comercializadas durante todo 2012. Asimismo, la compañía cordobesa Pauny –asociada a la Cámara de Fabricantes Argentinos de Maquinaria Agrícola– colocó 371 unidades en la plaza local, para aumentar 6,6 por ciento la venta (en cantidades). Como resultado, en los primeros cuatro meses de 2013 el negocio de los aparatos para el agro registró uno de los mejores desempeños de los últimos años.
La expansión de las ventas se debe fundamentalmente al repunte de la cosecha de 2013. El año pasado las malas condiciones de humedad ocasionaron un flojo desempeño de la campaña agrícola, con una producción de 90 millones de toneladas. En esta campaña, en cambio, la producción será de 103 millones. También se agrega el efecto del alto precio internacional de los granos, lo que les garantiza excedentes a los productores rurales para que reinviertan en nueva maquinaria. En el caso de la soja, el principal cultivo del agro, el valor de producción será uno de los más elevados de los últimos 12 años.
El financiamiento barato para incorporar maquinaria es otra de las razones que explica esa expansión. “Las ventas están motorizadas por los créditos, que los bancos privados otorgan a una tasa de interés de 15 por ciento, y el Banco Nación a una tasa de un dígito para maquinaria nacional”, precisó Miguel Mizzau, representante de una firma del sector. La banca pública ofrece una tasa subsidiada de 6,5 por ciento para la compra de un tractor de fabricación nacional. “Desde el punto de vista financiero, para el productor (del campo) la tasa de interés es muy beneficiosa”, agregó Karina Combert, gerente de ventas de otra firma.
En los primeros meses del año, la mitad de los tractores que se comercializaron en el mercado interno fueron de origen nacional. La diferencia es relevante respecto de 2002, cuando el 80 por ciento de los aparatos era importado. Durante los últimos dos años, hubo un importante avance en la producción de maquinaria local, permitiendo ensamblar muchos tractores en el país. “El desafío ahora es avanzar en una mayor integración de las partes y piezas”, explicó a este diario Juan Cantarella, referente de la rama de autopartistas. Desde la cartera de industria vienen trabajando para impulsar el bloque de proveedores argentinos. La ministra Débora Giorgi recordó la semana pasada que para el primer trimestre de 2014 los tractores deberán contener un 35 por ciento de partes locales, mientras que para principios del 2015 la participación se eleva al 50 por ciento.
Fuente: Pagina 12