Los Baroli diversificar para permanecer en el campo
Nacieron y se criaron en el campo. Lucas el mayor tiene 29 años. El que le sigue 28 y el menor 26. Integran un Grupo Profam del INTA Diamante. Trabajan de sol a sol porque están dispuestos a seguir ligados a este sector que los cobija y les permite crecer.
A muy pocos kilómetros de Diamante, casi en Costa Grande, dejamos la ruta asfaltada y por un camino vecinal llegamos a lo de Baroli. Custodiada por dos altas y corpulentas palmeras, se encuentra una casa antigua, con el clásico estilo de las casas de campo, amplias, altas, destinadas a albergar a las familias numerosas de otro tiempo. Allí trabaja y vive la familia Baroli. Allí dialogamos con Lucas Baroli.
“Nacimos en el campo y nos hicimos cargo de todas las actividades desde el fallecimiento de mi padre y mi abuelo que eran los que trabajaban”. Los Baroli tenían un pequeño tambo y criaban animales. En un momento deciden diversificar por si falla alguna actividad y para tener otras entradas alternativas. “Hacemos soja. También maíz para consumo de los animales. Realizamos ganadería en la isla y campo firme. Tenemos 60 propias y 30 arrendadas. Además nos dedicamos a la apicultura. La miel la comercializamos en Córdoba o Buenos Aires, depende del precio. Extraemos la miel en la Cooperativa Apícola de Diamante, de la cual somos fundadores y parte”, cuenta Lucas.
El INTA en sus vidas
Lucas comenta que “El INTA llega cuando empezamos a sembrar por nuestra cuenta y no teníamos mucha idea de cómo hacerlo. Habíamos comprado una sembradora y recurrimos a ellos que accedieron gentilmente a apoyarnos y desde entonces nos ayudan en todas las actividades. Mi madre participa en todo y realizamos toda la mano de obra entre nosotros. Solo buscamos ayuda en tiempo de cosecha o momentos claves”.
Curiosos y decididos Lucas y sus hermanos comienzan un día a comprar y vender máquinas y herramientas usadas. “Empecé hace dos años con herramientas usadas y ahora agregué también herramientas nuevas. Para los arreglos y composturas de las herramientas nos arreglamos solos. Tenemos que hacer muchas cosas para salir adelante porque si no estás complicado y siempre atado a los precios”.
Orgulloso Lucas comenta a modo de despedida, “me gusta hacer esto y estar en el campo. A todos nos pasa lo mismo. Mi madre, Sofía, a sus infinitas ocupaciones le suma, en sus ratos libres, por placer, el trabajo de la huerta para el autoconsumo. Es lindo hacer de todo un poco, ya nacimos para esto”.
La AER INTA Diamante siempre presente
Dialogamos con el Ingeniero Agrónomo Juan Manuel Pautasso bajo la sombra de un añoso Ombú. Atrás y a lo lejos se divisaba el típico paisaje entrerriano con una loma y un bajío. Vacas pastando sobre el verde natural de los campos. Al fondo se ve una lomada plena de soja madura con sus tonos amarillos gastados y marrones.
“Es muy raro encontrar a los hermanos Baroli quietos. Siempre están trabajando porque sus múltiples actividades requieren de mucha mano de obra. Es el precio. Ese es el precio que tiene que pagar para seguir viviendo y manteniendo el campo”, comenta el Ingeniero Agrónomo Juan Manuel Pautasso, Jefe de la Agencia de Extensión Rural del INTA de Diamante.
Pautasso, asesor, consejero y amigo, nos informa que la Familia Baroli está compuesta por la madre y tres hermanos varones. Integran un Grupo Profam, que funciona en la Agencia del INTA de Diamante.
“Se hacen cargo de una actividad diversificada, con agricultura, ganadería en tierra firme y en isla y apicultura. La mano de obra propia es lo que les ha permitido a los hermanos vivir todavía en el campo, mantener la producción y el campo. Lamentablemente ha pasado que la mayoría de los productores pequeños que no se diversificaron han tenido que arrendar su campo o buscar un trabajo extra para seguir viviendo. Ellos en casi 100 hectáreas están siempre en movimiento, siempre trabajando y es por eso que es raro encontrarlos”.
El Profam
El grupo Profam (Programa para Productores Familiares) que funciona en la Agencia del INTA de Diamante está integrado por los Baroli. Este Profam ya tienen una segunda etapa. Se formó inicialmente con alrededor de 10 ó 15 productores ganaderos como un subgrupo. El mismo Profam tenía otro subgrupo agrícola con 10-12 productores. Había también un grupo más pequeño con alrededor de 8 productores dedicados a la producción porcina. Hace tres o cuatro años hubo un momento muy complicado para la producción porcina y ese grupo se desarmó.
Pautasso cuenta que en ese entonces Lucas y su hermano comenzaban a hacer agricultura por cuenta propia y entonces los Baroli participan ahora de los 2 subgrupos. El de agricultura y el de ganadería.
“Uno le da una mano en el asesoramiento técnico. Estos pequeños productores tienen la ventaja de poder contar con el asesoramiento del INTA en sus actividades. Uno tiene los recursos para venir a visitarlos y plantear inclusive hasta los ensayos en su campo. El grupo Profam del cual es parte Lucas está funcionando muy bien y aporta a estos productores que quieren seguir en la actividad y ver la manera de imaginarse cuáles son las mejores acciones para mantenerse en el sistema”, dice Pautasso.
Grupo Profam integrado por jóvenes
Dice Pautasso, “quiero rescatar el trabajo del Grupo Profam que está integrado en un 80 por ciento por muchos jóvenes como Lucas y en una época donde no es muy frecuente ver que un joven tenga la cultura del trabajo bien arraigada. Trabajar con esta gente es un aliciente y le da ánimo para seguir trabajando”.
Ahora con un tiempo mejor para los porcinos se reflotó el grupo de porcinos y requiere una asistencia especial.
“Sí, para una mejor atención al grupo de porcinos, formamos un grupo de Cambio Rural y le dimos una atención mejor con un técnico asistiéndolos. Con el grupo agrícola ocurrió lo mismo y se conformó también un grupo de Cambio Rural.
Con Cambio Rural, asegura Pautasso, los productores pueden tener una asistencia un poco más frecuente y adecuada. El Profam da un asesoramiento muy útil pero no deja de ser un asesoramiento a muchos productores y el técnico no se puede dividir tanto.
INTA Diamante y otras actividades sustantivas
La Agencia del INTA de Diamante tiene también un gran trabajo en el Pro Huerta y en agricultura en escala mucho más chica.
“Hay un Proyecto Minifundio trabajando en la zona de Las Cuevas, Las Masitas que demanda mucho la presencia del INTA. Está en eso la Ingeniera Agrónoma Luciana Zapata. Y además estamos trabajando en la AER en los dos proyectos territoriales: el del DELTA y el del Centro Oeste como nos demanda el territorio”, finaliza Pautasso.
Fuente: Inta Diamante