Advierten que el trigo se encuentra en situación de quiebra
Según un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario, el trigo se encuentra en situación de "quiebra" por mayores gastos y el aumento de la presión fiscal.
El trigo se encuentra en situación de "quiebra" por mayores gastos y el aumento de la presión fiscal, según un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
La advertencia fue realizada por Patricia Bergero, del Departamento de Economía de la BCR quien sostuvo que el cuadro crítico se debe a "las restricciones a las exportaciones; la complicada y demorada -en tiempos de inflación- devolución de los derechos de exportación; la diferencia entre el precio del mercado y el FAS teórico (bastante teórico últimamente desde el momento que sólo aparecen puntas vendedoras FOB)".
Además, sumó como factores "el nivel de los precios internacionales; los problemas para financiarse a tasas razonables -con mayor presión sobre la caja que solía ser el trigo- o el imparable aumento de costos, entre los más destacados".
¿La solución? "Para revertir pérdidas tienen que obtenerse rindes muy elevados o los precios deben aumentar radicalmente", explicó.
Destacó un ejemplo efectuado por la especialista Sofía Corina, del Departamento de la Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa, en el cual puede apreciarse el margen del cereal para lo que ha sido el rinde promedio de la zona núcleo, de 3.400 kilos por hectárea, en un esquema de producción bajo arrendamiento, con nivel de tecnología media-alta.
PRECIO
Mientras que en el ejemplo, el trigo forma parte de una rotación con soja y con una distancia a puerto de 180 kilómetros, es decir al Gran Rosario. Así, con un precio de mercado interno de 132 dólares la tonelada, el ingreso bruto asciende a 449 dólares por hectárea, pero al deducir el total de costos por 677 dólares la hectárea, el margen bruto es negativo en 230 dólares.
El desfasaje se produce al asumir el productor los gastos de implantación (labores e insumos) por 279 dólares la hectárea, los de cosecha y seguro por 46 dólares, los de comercialización por 102 dólares y el costo del arrendamiento por 250 dólares.
"En este ejemplo no se hace una distinción de los impuestos, que son parte de las obligaciones de un empresario productor y, por lo tanto, parte de su estructura de costos", indicó.
Este emprendimiento integra una rotación -el costo del arrendamiento está repartido con el cultivo sucesor-, por lo que la producción unitaria de la soja y "su precio es muy importante para que el productor no se descapitalice".
"Aparte del derecho de exportación, que representa el 65% sobre el total de los gravámenes, hubo un incremento trascendente en los otros tributos, o mayor impacto por la no recuperación de los saldos fiscales a favor del productor", dijo. Retirada buena parte de la exportación, "no existe competencia en el mercado, hay sobreoferta, demanda limitada temporalmente y los precios se ven presionados a la baja", señaló Bergero.
Fuente: Ambito Financiero