MaÃz, impacto económico en su camino a Rosario
El MaÃÂz es uno de los cereales más importantes de Argentina, clave en la rotación de cultivos y un insumo primordial para el desarrollo de distintas industrias. En Entre RÃÂos permite la transformación de un producto primario en innumerables cadenas agroindustriales, sobre cuya estructura descansa la actividad económica y productiva del paÃÂs.
Pero ¿Cuál es el impacto económico del maíz en su camino a Puerto de Rosario desde Entre Ríos? Para conocer este impacto, debemos analizar el precio del maíz el cual es determinado en el mercado entre el juego de la oferta y la demanda, convirtiéndose en una variable incontrolable para el productor. A esta incertidumbre del precio, se suma el rendimiento por hectárea que va a obtener por dicho cultivo, ya que de la ecuación precio por cantidad el productor sabrá si podrá pagar los gastos de la inversión y así obtener ganancias.
Durante el momento previo a la siembra, el productor analiza los costos de implantación con precios a futuro para ver si es conveniente o no arriesgar su capital en dicho cultivo.
Debemos resaltar que en cultivos de alto volumen y bajo precio (en relación a la soja) como es el caso del maíz y el sorgo, el flete largo juega un papel casi definitorio en el margen que le queda al productor, transformando las zonas más alejadas al Puerto de Rosario en marginales para dicha producción por distancia. El productor necesita más kilos de maíz por tonelada transportada para pagar dicho flete. Por ejemplo si el maíz vale 1000 $/tn y llevarlo a Rosario cuesta 250 $/tn ese productor cada 4 toneladas por hectárea que coseche, deberá destinar una tonelada al flete. Es decir, en realidad es como si el productor hubiese cosechado tres toneladas en Rosario. A mayor distancia menos kilogramos le quedan al productor para hacer frente a los gastos, con lo cual el margen es menor y en la mayoría de los casos desalienta dichas siembras, transformando estas zonas, en zonas marginales por distancia.
Hay dos tipos de fletes: el corto que se realiza para llevar los granos en el momento de la cosecha desde el campo hasta el acopio o cooperativa, con un recorrido promedio de 20 a 50 km dependiendo de la zona; y el flete largo, que es aquel que transporta los granos desde el acopio o cooperativa hasta el puerto o planta industrial. Generalmente se realiza después del paso por el acopio para su condicionamiento. En este caso no analizaremos el flete corto.
Para tener una idea de las distancias, en el siguiente mapa se muestran las distancias a Rosario por las rutas principales de la provincia:
Conociendo la distancia, al puerto de Rosario utilizando las principales rutas, podemos calcular los precios de los fletes, que se muestran en la siguiente tabla:
Teniendo en cuenta estas distancias y los valores de los fletes obtenidos de la AFIP, podemos calcular cuántos kilos de maíz debe vender un productor para poder llevar una tonelada de su mercadería a Rosario. Si tenemos en cuenta el rendimiento provincial promedio para esta campaña (2012/13), de 6.400 kg/ha, para la provincia podemos calcular cuántos kilos se requieren para poder vender la producción de una hectárea.
De esta forma el flete es en realidad un costo que resta al precio, es decir el maíz de un productor de Paraná vale el precio pizarra Rosario menos el flete; mientras que el productor de Federal percibe por esa mercadería un precio menor por estar más lejos en la tabla.
Podemos observar como al flete lo podemos traducir en kilos de maíz necesarios para pagarlo, a modo de ejemplo:
Si tomamos un precio de $ 840 por tonelada de maíz, para para simplificar el cálculo se toman rangos de precios cada 50 km y se le imputa un valor promedio, vemos en la siguiente tabla el costo de flete promedio entre las dos distancias.
Este flete promedio se lo convierte en kilogramos de maíz y luego se los multiplica por el rendimiento; lo que me permite obtener cuántos son los kilogramos por hectárea que me demanda el flete. Esto se traduce en un menor ingreso bruto por hectárea, en las zonas alejadas respecto de las cercanas a puerto. Por lo tanto, un productor que esta a 70 km destina unos 610 kg de maíz para pagar el flete y uno que esta a 350 km debe destinar aproximadamente 2 toneladas para afrontar dicho gasto.
Este menor ingreso bruto por hectárea lo podemos graficar en un mapa que nos muestre cómo impacta esta distancia a puerto en el ingreso bruto del productor, el impacto lo podemos medir como porcentaje sobre el total del ingreso.
Observamos cómo a partir del color amarillo hacia el rojo pasamos de un 22% hasta un 29%, es decir un productor del norte entrerriano destina alrededor de un 30% del rendimiento de maíz para pagar flete.
Fuente: Ing. Agr. Flavio Galizzi - Especial para Momento de Campo