¿Por qué controlar brucelosis en tambos?
Más del 70% es libre de la enfermedad; mientras que en el resto del rodeo argentino la prevalencia es de menos de 1%. Recomendaciones del Senasa para la prevención.
La brucelosis, una enfermedad infecciosa que afecta al aparato productivo de las vacas y puede transmitirse a los humanos, tiene una muy baja prevalencia en los rodeos argentinos y, en el caso de los tambos, donde más del 70% de los establecimientos (más de 8.000 entre 11.000) está certificado como libre de la enfermedad. "Es un buen estatus sanitario que favorece la exportación", afirmó el responsable del Programa Brucelosis, de la Dirección Nacional de Sanidad Animal del Senasa, el veterinario Jorge Hart.
Abarcando a los rodeos bovinos lecheros y carniceros, la situación general de la Argentina respecto de la brucelosis es que la enfermedad es endémica pero con un nivel de prevalencia de 0,8%, aunque en establecimientos es del 12%.
"En el último estudio realizado sobre un universo de 30 mil vacas se encontraron 246 animales positivos que es 0,8. Ahora si queremos saber en qué proporción de establecimientos están, la cifra sube a 12%; es decir que de un muestreo de 810 campos de donde se tomaron 42 muestreos de cada rodeo resultó que 100 predios dieron al menos 1 positivo", explicó Hart.
La enfermedad tiene un calendario de vacunación obligatorio, principal herramienta para su combate. "Anualmente se vacunan las terneras de 3 a 6 meses en conjunto con las campañas de fiebre aftosa, lográndose vacunar entre 6,5 y 7 millones, un stock que se mantiene desde hace 10 años. El porcentaje de cobertura es alto, mayor a 95%".
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) tiene un plan para la enfermedad basado en 4 estrategias sanitarias: la vacunación, el control de movimientos, la categorización de los establecimientos bajo algún estatus sanitario y la vigilancia epidemiológica.
"El objetivo final es erradicar la enfermedad y estamos en una etapa de control avanzado con baja prevalencia. Ahora hay que empezar a avanzar con más presión en la erradicación", adelantó el especialista.
Recomendaciones
Además de vacunar, que es una cuestión obligatoria, Hart dejó otros consejos para los productores sobre la vigilancia de sus rodeos.
Principalmente, identificar si hay signos clínicos compatibles con la enfermedad, como casos de abortos, infertilidad, aparición de terneros débiles; y contar con asesoramiento veterinario.
Otra recomendación importante es cuidar el estado del rodeo porque si no tiene brucelosis tiene que controlar el estado sanitario de los animales que ingresan, realizar una cuarenta previo al ingreso al rodeo y hacer los análisis de brucelosis. "Se dice que la brucelosis entra y sale caminando".
La brucelosis es una enfermedad infecto contagiosa producida diferentes bacterias del género brucella que afecta a diferentes especies animales (bovinos, caprinos, cerdos). Produce una infección que provoca síntomas reproductivos, sobre todo en la placenta. "Todas estas pérdidas (abortos, infertilidad) son pérdidas económicas: de terneros, kilos de carne, litros de leche y afecta las glándulas mamarias".
También es una zoonosis: en el ser humano causa lo que se llama fiebre ondulante, con alta temperatura, sudoración, decaimiento, dolor de articulaciones. Es una enfermedad profesional, afecta principalmente a las personas vinculadas a la actividad pecuaria y también a personal de frigoríficos y de laboratorios. Se trasmite por el contacto con las secreciones del animal. "Además la brucella se elimina por la leche, entonces consumir leche o quesos elaborados por leches sin pasteurizar", alertó Hart.
Fuente: Prensa ExpoLáctea 2017