¿Cuánto incide el trigo en el precio del pan?
El Gobierno creó un fondo para contener el precio de la harina, pero ese insumo tiene un peso minoritario en el precio final del pan.
Con el precio internacional del trigo en alza por la guerra entre Rusia y Ucrania, dos de los mayores productores, el Gobierno decidió intervenir el mercado creando un fideicomiso al que llamó Fondo Estabilizador Temporal del Trigo Argentino, que será administrado por la Secretaría de Comercio Interior, manejada por Roberto Feletti. Este Fondo será financiado por el alza de dos puntos en los derechos de exportación de la harina y el aceite de soja, con el que el Gobierno estima recuadar U$S 350 millones extras.
De esta manera esperan contener el precio de la harina de trigo para las panaderías a $25.000 la tonelada, valores previos a la guerra entre Rusia y Ucrania, contra los $35.000 que se comercializa por estos días. Lo que no se aclaró es cómo se distribuirá los fondos a los molineros ni cuánto puede llegar a bajar el precio del pan al consumidor a partir de esta medida.
Mientras el Gobierno lanza este paquete de medidas para combatir la inflación, son diversos los estudios que se han publicado que reflejan que el sector productivo tiene una baja incidencia en el precio final de los alimentos. En el caso del pan, según las últimas estadísticas de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), el trigo representa el 12,9% del valor final del pan, el molino el 5,2%, la panadería el 60,4% y los impuestos el 21,5%. Por otra parte, dicho precio está compuesto en un 67% de costos, el 21,5% impuestos y el 11,5% ganancias. Además, el precio del trigo se multiplica por 7 desde el campo hasta que el pan llega a la góndola.
El Gobierno ya había intervenido el mercado de trigo poniendo un volumen de equilibrio, lo que equivale a una cantidad de toneladas determinadas que podrán ser exportadas cuando los funcionarios lo crean conveniente. Ahora, por ejemplo, el Ministro de Agricultura Julián Dominguez anunció que se abrieron los registros de exportación del cereal de la cosecha 22/23, es decir la que todavía no empezó a sembrarse, por un total de 8 millones de toneladas, que se suman a los 2 millones autorizadas. «Esto permitirá dar previsibilidad para la siembra, captar los precios internacionales y lograr un nuevo récord de producción», aseguró el funcionario.
Fuente: FADA