Avanza a buen ritmo la cosecha en centro-norte santafesino
“Los procesos de cosecha nuevamente tuvieron diferentes ritmos y grados de avance, según las diferentes zonas, por el impacto de las lluvias.
Hasta el momento las distintas estrategias de logística implementadas, ante la especial situación epidemiológica mundial y nacional, se desarrollaron bien, sin grandes complicaciones y a ritmo sostenido se concretó la recolección”, dice el informe de Estimaciones Agrícolas para el centro norte de la provincia de la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
Las actividades agrícolas, tuvieron diferentes grados de acción, siendo la cosecha de soja de primera, algodón, arroz y sorgo granífero, el monitoreo - seguimiento de los cultivares y las aplicaciones de herbicidas – insecticidas, a las que mayor cantidad de tiempo, se les dedicó.
Algodón
Zonas este-oeste: semana con muy poca actividad en el comienzo de la misma, por la inestabilidad climática, precipitaciones, alta nubosidad y porcentajes de humedad ambiente medios a altos, que afectaron el ritmo del proceso de cosecha del algodón.
Las condiciones climáticas cambiaron con el transcurso de los días y lentamente se reanudó la recolección.
Área este: con un progreso en el proceso de cosecha del orden del 30 %, los rendimientos promedios obtenidos continuaron manteniéndose superiores a 22 qq/ha, con mínimos de 15 qq/ha y máximos de 30 qq/ha.
La tendencia alcista enunciada en el informe anterior se mantuvo, lo cual siguió reforzando la consideración por parte del sector productivo, como buenos a muy buenos los registros logrados anteriormente.
Área oeste: con un progreso en el proceso de cosecha del orden del 18 %, los rendimientos obtenidos en promedio oscilaron 21 y 23 qq/ha, con mínimos de 10 qq/ha y máximos de 32 qq/ha.
En general, el estado del cultivo siguió siendo bueno, a excepción de los cultivares sembrados en fechas más tardías.
Continuó la recomendación a los productores de la necesidad del monitoreo de las trampas para picudos, en los lotes donde la etapa de floración estuvo llegando a su fin y en los que comenzaron las etapas de defoliación y recolección, para la posible captura de los insectos, en caso de presencia, disminuyendo así su población.
Conjuntamente se concretaron aplicaciones de reguladores de crecimiento y defoliantes.
Soja temprana
A medida que fueron transcurriendo los días y la estabilidad climática se recuperó, el ritmo de la cosecha se consolidó, con una mayor actividad en el área de los departamentos del sur y parte de los del centro.
El silo bolsa se impuso como la solución para la presente campaña. A lo largo del período, los rendimientos obtenidos continuaron reflejando la heterogeneidad climática que se presentó en toda el área de estudio, con una variabilidad marcada según zonas, departamentos y áreas, dependiendo la escala de análisis y comparación de la cosecha.
Ante ello y transcurrido un par de semanas de trilla, el área centro norte de los departamentos del sector norte, fue la que manifestó el impacto de las condiciones climáticas y su diversidad.
El avance del proceso de cosecha fue del 34 %. Hasta la fecha el estado sanitario continuó siendo bueno, sin problemas relevantes.
Soja tardía
Las condiciones ambientales que se registraron en los últimos quince días, su variabilidad y heterogeneidad en la distribución geográfica, consolidaron la situación en que se encontró el cultivo.
Un 55 % en estado bueno a muy bueno, con lotes puntuales a excelentes, un 20 % en estado bueno a regular, con mediano desarrollo de estructura de plantas, no llegando al cierre de los surcos, un 20 % regular y un 5 % malo.
Ante lo enunciado, indicadores como desarrollo foliar limitado, estructura de plantas medias a bajas, surcos no cerrados, lotes manchonados, poco uniformes y mortandad de plantas, difícilmente cambiarían, dada la etapa fenológica de los cultivares.
Continuaron las aplicaciones de herbicidas e insecticidas.
Maíz tardío
Las realidades ambientales y climáticas que se registraron desde el inicio de ciclo hasta la fecha, mostraron dos escenarios bien definidos, coincidiendo con lo fundamental: fecha de siembra.
Los implantados más temprano, fueron los que mejor recibieron las lluvias, porque consolidaron el llenado de los granos, período crítico. No así para los tardíos, porque no llegarían a una recuperación en el desarrollo, tanto de las plantas como foliar, por lo cual las consecuencias serían irreversibles y se reflejarían en una disminución de los qq/ha finales obtenidos.
Por ello, la inestabilidad climática de las dos últimas semanas, beneficiaron a los cultivares mencionados en primer término y mostraron estados buenos, muy buenos a excelentes, no así los segundos que no evidenciaron ninguna reacción, solo varió la coloración de plantas, por el momento.
Sorgo granífero
Los cultivares se mostraron en un 75 % en estado bueno a muy bueno, con algún lote excelente, un 15 % en estado bueno a regular y un 15 % regular a malo.
Este último, en situación irreversible, seguramente con cambio de destino, serían picados para alimentación del ganado (en caso de explotaciones mixtas).
Lentamente continuó el proceso de cosecha que se había iniciado la semana anterior, con un progreso del orden del 10 %.
Los rendimientos promedios mínimos oscilaron entre 20 y 25 qq/ha y los máximos 50 y 55 qq/ha, con lotes puntuales muy buenos de 60 qq/ha.
La sanidad detectada fue muy buena y sin riesgos hasta el momento.
Fuente: BCSF | Campolitoral