Presentan arado multicorte para agricultores familiares
Busca mejorar los suelos, minorizar los costos y a su vez, aumentar los rindes. Es un sistema de labranza de corte vertical y horizontal que permite realizar labores primarias y culturales mejorando el suelo.
La propuesta de José Pablo Sabatino, uno de los integrantes de la Cooperativa Icecoop fue clara y contundente. La agricultura familiar agroecológica necesita y construye otra economía y para ello también requiere del desarrollo de tecnologías y maquinarias que se adecúen a sus particularidades específicas, sustentable, inclusiva y que produzca un diálogo de saberes entre los actores sociales que participan en la producción. Las Jornadas demostrativas: “Tecnologías de labranza, siembra y cosecha para la Agricultura Familiar”, fueron organizada por la Mesa de Gestión local para la economía social y solidaria de Concordia (MEGLESS) y contó con la presencia de más de 100 personas entre productores/as, alumnos de la Escuela Agrotécnica San Martín, de la UTN, técnicos/as y público en general.
Las jornadas iniciaron el jueves 20 en la sede de la Cooperativa Agropecuaria, Apícola y Granjera el Colmenar donde se probó una de las maquinarias, el arado Multicorte. La misma fue presentada el viernes 21 en las actividades que se desarrollaron en la sede de INTA Concordia.El arado multicorte fue explicado por el Ing. Agr. Carlos Ronzoni, integrante de Icecoop, quien inició su alocución con un interrogante. “¿Por qué creen que durante tanto tiempo la humanidad volteó el suelo?”. Algunas respuestas se escucharon. “Falta de conocimiento. Costumbre”, a lo que el ingeniero concluyó: “y fundamentalmente un desconocimiento absoluto de cómo se forman los suelos, sin ello no podría existir vegetación”.
En ese sentido, la máquina que se presentó busca mejorar los suelos, minorizar los costos y a su vez, aumentar los rindes. Es un sistema de labranza de corte vertical y horizontal que permite realizar labores primarias y culturales mejorando el suelo.
Esta maquinaria comenzó a diseñarse por algunos de los integrantes de la cooperativa hace diez años en Cuba. Allí se comprobó que lograba no erosionar el suelo, uno de los problemas fundamentales que atraviesa la agricultura, además de que permite trabajar la tierra sin la utilización de químicos. “¿Por qué se están usando tantos herbicidas?”, interrogó nuevamente Carlos Ronzoni y las respuestas no se hicieron esperar: “Porque es un negocio. Es más fácil”. Y nuevamente se oyó:“Se ha hecho una costumbre”. En ese marco, Carlos planteó entonces un nuevo desafío: “hacer siembra directa y no usar herbicidas”. Para concluir, el ingeniero interpeló a todos: “Nuestra intervención se defiende con la intervención de ustedes”.
Posteriormente, José Pablo Sabatino explicó la forma de trabajo que tiene Icecop. Manifestó que la cooperativa se relaciona con la Agroecología (AE) desde diversos puntos. Como empresa aporta a la AE en la práctica productiva, a través de un sistema de labranza socio técnicamente adecuado. Como cooperativa contribuye al movimiento social de la Agroecología con un enfoque emancipador que fortalece actores sociales y territorios. Y además colabora con la AE como disciplina científica y aporta a la misma desde la investigación. En ese sentido, participa y coopera con la Red de Labranzas Agroecológicas (REDLA). Un espacio virtual y presencial de intercambio para que usuarios, técnicos, investigadores y desarrolladores compartan sus conocimientos y experiencias. Es interesante destacar que esta red se está iniciando en Entre Ríos.
Además de la tecnología multicorte, se presentaron dos tecnologías más. Powel ingeniería exhibió una sembradora manual que tiene posibilidades de adaptación para abarcar distintos tipos de semillas y Osvaldo Pilatti de INTA Rafaela, presentó una cosechadora de arrastre de trigo, adaptable a otros cultivos que se llevó a cabo a través de un convenio entre INTA y el Instituto de Tecnología Industrial (INTI). La construcción de este prototipo, denominado “La Reconquista”, demandó cuatro años de trabajo conjunto entre diversos técnicos de los organismos y fue fabricada por cuatro grupos de empresas del Norte, Centro y Sur de Argentina.
Las tecnologías, que fueron probadas al concluir las disertaciones, invitaron a dialogar sobre diversos aspectos entorno al modelo productivo. Alexis Lambertsde Cafesg, aclaró a los participantes que todo lo que se había consumido durante el día había sido comprado a micro emprendedores locales, con lo cual instó a la importancia que tiene la generación de un consumo responsable como parte fundante de una producción sustentable. Elías Garcia, técnico de la Secretaría de Agricultura Familiar explicó la importancia de la participación de los jóvenes. Ricardo Gimenez de la Cooperativa El Colmenar hizo hincapié en la búsqueda conjunta de El Colmenar e Icecop de lograr una producción ecológica e invitó a todos a pasar por el predio en unos días para comprobar el tratamiento que se le hizo al suelo en el inicio de las jornadas.
Por último, Andrés Jorge de INTI expuso algunos de los aspectos que motivaron el encuentro. “Estuvimos trabajando en función de distintas herramientas vinculadas al trabajo de la Agricultura Familiar, diseñadas por cooperativas y empresas nacionales en un marco vinculado a la producción agroecológica”. Asimismo, comentó que los desarrollos parten de demandas de la AF y que por falta de disponibilidad en el mercado son las cooperativas junto al Estado, quienes facilitan su realización. “Lo que vemos es que hay un segmento que no es desarrollado por el mercado por la sencilla razón de que no son los nichos de rentabilidad más fuerte para una estrategia comercial netamente empresarial y en ese sentido es donde vemos la importancia del trabajo y la articulación estatal en función de promover el desarrollo de tecnologías y maquinarias para este estrato de producción y facilitar las posibilidades de acceso a través de grupos y cooperativas a este tipo de herramientas”, especificó.
Un proyecto emancipador como el que pretende la Agroecología, plantea transformar lógicas y desnaturalizar procesos históricos de concepciones. Otra tecnología, como la que imperó durante el encuentro; mantiene un diálogo complementario con una economía social solidaria, como la que busca MEGLESS, y necesita de una agricultura familiar, campesina e indígena organizada.
“De alguna manera está instalada una lógica cultural, donde los bienes se utilizan de manera individual y surgía la pregunta de cómo hace el agricultor familiar para acceder a las tecnologías. En ese sentido, esto surge de experiencias concretas que tiene que ver con el uso conjunto a través de organizaciones, que establecen pautas y criterios de utilización, y compartan las herramientas. Más aún porque no es necesario que cada uno individualmente tenga este tipo de herramientas en su predio”, concluyó Andrés Jorge.
CAMAF
La Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinarias para la Agricultura Familiar está integrada por micro y pequeñas empresas de todo el país que desarrollan herramientas y maquinarias para la Agricultura Familiar. Su presidente Marcos Pedro Follonier, participó de las Jornadas en Concordia y comentó que la sede de la CAMAF actualmente es esa localidad del noreste entrerriano. Además disertó sobre los objetivos, funciones y el surgimiento de esta Cámara que acompaña el desarrollo de la Agricultura Familiar en todo el país y Latinoamérica.
Fuente: Prensa: SecretarÃÂa de Agricultura Familiar - Delegación Entre RÃÂos