¿Cómo se puede ingresar al negocio ganadero?
Hay varias formas de acceder al negocio ganadero, relacionadas directamente con el nivel de conocimiento y dinero a invertir.
La queja es generalizada. Muchos sectores dedicados a los alimentos la están pasando muy mal, en especial las economías regionales. La combinación de dólar atrasado, caída de los precios internacionales, presión impositiva y fuerte aumento de los costos internos son la justificación perfecta que llevaron al desincentivo y a la pérdida de negocios en el exterior. Pero, con algunos cambios de política, hay actividades que tienen un gran potencial y pueden recuperar el terreno perdido. La clave, como siempre, es anticiparse.
Durante más de un siglo, el país fue uno de los mayores proveedores de carne del mundo, y reconocido por su calidad; pero, en los últimos años, se perdió protagonismo a manos de productores con menor tradición en el rubro. En 2005, la Argentina fue el tercer exportador a nivel global: ahora ocupa el undécimo lugar, superado por sus socios del Mercosur (Brasil, Paraguay y Uruguay).
El caso más paradigmático es el de Brasil, que durante la década del ‘90 importaba carne y ahora está segundo en el ranking de exportadores. Asimismo, el avance de la soja y otros cultivos le ganó terreno a las vacas, sin olvidar las políticas de Estado desalentadoras contra el sector.
La oportunidad de invertir en la ganadería argentina es ahora, ya que es un negocio de mediano y largo plazo: por cuestiones naturales de su proceso, requiere de anticipación y de un inversor dispuesto a esperar varios ciclos para poder ganar.
ASÍ FUNCIONA
El negocio de las vacas está relacionado con el ciclo de vida del animal en sus diferentes etapas. Están los que se dedican a la cría (tienen vacas y toros y venden el ternero) y quienes optan por la recría del animal (compran los terneros a los criadores, luego los alimentan y venden los novillos –más de 300 kilos– a un invernador que se dedicará a engordarlo para venderlo al frigorífico).
Se pueden comprar terneros de 150/170 kilos promedio que se venderán, luego del período de inversión de 365 días, en 280/320 kilos. La ganancia es la diferencia de peso, de alrededor de 130 kilos entre la fase de ternero y novillo. Vale aclarar que el negocio ganadero tiene muy bajo riesgo climático sobre pastizales naturales y generalmente tiene baja mortandad.
ASÍ SE INGRESA
Hay varias formas de acceder al negocio ganadero, relacionadas directamente con el nivel de conocimiento y dinero a invertir. De menor a mayor, la manera más sencilla y económica es a través de fideicomisos, que ofrecen interesantes rendimientos tanto en pesos como en dólares, y en donde el inversor obtiene una rentabilidad de un negocio de gran escala al que de otra forma no podría acceder.
El sistema es muy sencillo: el administrador del fideicomiso gestiona el negocio, maneja el capital de todos los inversores y luego devuelve el resultado de su gestión a través de un rendimiento. La inversión mínima es desde $ 40 mil y la rentabilidad proyectada en pesos oscila entre un 35 y 40 por ciento, mientras que en dólares algunos ofrecen la tasa de devaluación más unos puntos de interés.
Las otras opciones son encarando la actividad de forma particular o comprando/alquilando una superficie de campo adecuada para la escala de negocio elegida. Obviamente, en estos casos los márgenes de ganancia y el riesgo se incrementan.
ESTE ES EL PRONÓSTICO
Si se analiza la foto de hoy, el negocio ganadero no resulta muy alentador: menos del 7 % se exporta y el resto se consume en el mercado interno, en donde los frigoríficos tienen que administrar el control de precios de algunos cortes a un valor de liquidación.
Con un cambio de política que asuma el Gobierno, estas dificultades podrían cambiar, eliminando retenciones y liberando las exportaciones para que la Argentina recupere su liderazgo en el sector. La necesidad del mundo de alimentarse sigue intacta y en crecimiento: países como China incrementan sus importaciones de carne, tendencia que viene siendo acompañada con el aumento del precio internacional.
Entonces sí: en caso de liberarse las exportaciones y de mejorar su competitividad, se necesitará de mayor producción para abastecer el mercado interno, motivo por el cual es importante ingresar hoy a un negocio que puede repuntar en el mediano plazo. A partir de 2016 la ganadería puede tomarse una revancha y empezar a recuperar todo el terreno perdido.
ALTERNATIVAS
Una forma distinta de posicionarse en el negocio de los alimentos es a través de empresas que cotizan en la Bolsa. Algunos de los papeles relacionados con el sector son:
Quickfood
La compañía que inventó el Paty es, actualmente, una de las más grandes en cuanto a elaboración y comercialización de productos de origen vacuno y porcino. Entre enero y marzo, la acción subió un 12 %.
Molinos Río de la Plata
Líder de la industria alimenticia de América del Sur, con presencia en 50 países, es uno de los principales procesadores de soja y comercializadores de sus derivados. Entre enero y marzo, la acción subió un 17 %.
Cresud
Se dedica a la producción agrícola (granos y oleaginosas), ganadera (cría y engorde de ganado), lechera (2.600 vacas en ordeñe por día). Entre enero y marzo, la acción subió un 34 %.
SOJA DEJÓ DE SER RENTABLE
En la Argentina, pese a ser uno de los principales productores de soja del mundo, en algunas zonas el cultivo dejó de ser rentable, derivando en la desaparición de empresas y emprendimientos. ¿Cómo puede ser que el país sea reconocido por su capacidad para producir alimentos de calidad pero no sea competitivo ni rentable?
*Director de la Escuela Argentina de Finanzas Personales www.salirdelcolchon.com.ar