La devaluación ya se siente en los precios
El ajuste del tipo de cambio abrió nuevas expectativas por el lado de la exportación y el incremento en las cotizaciones de los granos. Para la industria de la maquinaria el impacto se observa por el lado de los costos de producción.
Las últimas cuatro semanas han sido movidas para la industria de la maquinaria agrícola. Por un lado, el aumento en el tipo de cambio abrió las puertas a una mejora en la competitividad de las empresas que exportan. Por el otro, la falta de freno a la inflación ha impactado de lleno en los costos de producción. Mientras muchas empresas buscan acordar la provisión de insumos claves, en un contexto de precios inestables, como es el acero, otras ya han actualizando sus listas de ventas.
Nuevos precios. A partir de febrero, fábricas que comercializan sólo su producción en el mercado interno resolvieron aumentos del orden del 7% en sus equipos.
Insumos importados. Aquellas industrias que no tienen presencia exportadora, pero sí necesitan de la importación para su desempeño productivo, serán las más condicionadas a la hora de trasladar los costos al precio final. Para este tipo de empresas (que importan, pero que no exportan), el Gobierno sólo les autorizaba un reajuste en los valores de sus productos finales del 18% anual. A juzgar por las proyecciones de inflación para el presente año, el porcentaje de actualización debería ser revisado, según sostienen los empresarios.
Más costos anuales. Mientras aguarda por un acomodamiento en los precios (y también en la disponibilidad) de los insumos, la industria de la maquinaria agrícola sabe que tiene en los próximos meses por delante más costos para afrontar. La negociación paritaria con el sindicato que agrupa a los trabajadores del sector (UOM) podría tener un piso de aumento salarial del 30%. El valor de la energía también podría encarecerse.
Competitividad. Si bien aún es prematuro sacar conclusiones definitivas, la exportación parece tomar algo de oxigeno a partir de la mejora en el tipo de cambio. En ese contexto, los competidores regionales de la maquinaria agrícola nacional siguen de cerca la marcha de las variables económicas argentinas. Según los economistas brasileños, la moneda del vecino país probablemente se devaluará durante este año hasta 2,50 reales por dólar y auguran una activa intervención del Banco Central para evitar una mayor depreciación monetaria. Con mayores costos de producción que en Argentina, los empresarios brasileños también seguirán de cerca la evolución de su tipo de cambio para no perder competividad en la región.
Fuente: Por Alejandro Rollán - Maquinac