Cerealeras: si suben los costos sufrirán los productores
Es porque ahora deben salir a buscar crédito en dólares: pagarán menos por los granos. Dicen que el costo financiero será más alto y al final del dÃa pagará el producto.
La decisión del Banco Central de impedir a las grandes cerealeras que sigan absorbiendo crédito local en pesos, para volver a financiarse con dólares que lleguen desde el exterior, podría finalmente perjudicar a los productores, según se evaluaba ayer en el sector. Algunos analistas prevén un encarecimiento del crédito para el principal sector exportador del país, que inmediatamente sería trasladado en un menor precio por los granos.
“Esta medida puede encarecer el costo de financiación de las empresas. El exportador automáticamente trasladaría ese mayor costo a los precios”, advirtió un empresario que conoce bien el paño y que calculó que afuera la tasa es del 5% en dólares, mientras que aquí las tasas –aunque más altas en pesos– equivalían a un 2%. Gustavo López, analista de Agritrend, confirmó: si hay un costo financiero mayor, se recortará de inmediato el precio pagado al productor.
La nueva normativa del Central, según otro análisis, afectará especialmente a las cerealeras que además de exportar venden insumos a los chacareros. Es el caso de Nidera, que vende en el mercado interno semillas y fertilizantes por US$ 500 millones. Otras venden algo de fertilizante como Dreyfus y Bunge. El tema son los cheques que los productores entregan post datados a cosecha y los exportadores cambian en los bancos.
Al dar a conocer la medida, fuentes del Banco Central apuntaron que las grandes traders tomaron en lo que va del año 11.000 millones de pesos del sistema financiero local. Esa suma llamó la atención porque antes los préstamos en pesos al sector eran casi inexistentes. Hasta que comenzó el ruido cambiario, lo habitual era que las exportadoras trajeran dólares del exterior de sus casas matrices o de bancos internacionales.
“Hace un tiempo hubo alguna sugerencia para que cancelemos deuda en pesos y se comience a tomar deuda en el exterior. Ahora pasaron a los hechos”, indicó una fuente del sector. Axel Kicillof y Mercedes Marcó del Pont, la titular del Central, habían pedido a las cerealeras volver a financiarse en el extranjero. Fue cuando les aconsejaron también hacer oídos sordos a una propuesta que barajaba Guillermo Moreno para que suscribieran BAADE e ingresaran dólares por esa vía. Las cerealeras reclamaban compensaciones, como un tipo de cambio diferencial, la devolución acelerada del IVA o un “waiver” a una millonaria deuda que les reclama la AFIP.
Además del componente especulativo alimentado por la alta inflación, tomar crédito en pesos fue la forma que encontraron los exportadores para reducir el riesgo cambiario. Además, ser “socios” de los bancos locales era útil para atenuar el riesgo político, ya que el gobierno debería pensar dos veces antes de lanzar medidas groseras, como su recurrente amenaza a recrear la Junta Nacional de Granos.
Lo cierto es que, a partir de la disposición del BCRA, Cargill, Nidera, Dreyfus, Bunge, AGD y ADM tendrán que volver a pedir prestados dólares afuera, traerlos al país y liquidarlos ante el Central. Es otra de las tantas maneras que encuentran las autoridades de alimentar las flacas Reservas del BCRA. No es que el sector cerealero esté en deuda: hasta fin de octubre había liquidado U$S 20.900 millones, unos 500 millones más que a igual fecha de 2012. Pero nada parece alcanzar.