Aceite de girasol ¿Virgen y refinado?
Nuevo criterio para comercializar aceite de girasol: ahora podrá conocerse con mayor precisión aquellos con mayor contenido de ácidos beneficiosos para la salud. Comienza a regir en febrero de 2014.
Hasta el momento el Código Alimentario Argentino determina tres categorías para comercializar aceite de girasol: virgen, alto oleico y alto esteárico-alto oleico. Pero a partir de ahora habrá una mayor diferenciación del producto.
La resolución conjunta 223/13 y 332/13 de las secretarías de Agricultura y de Políticas de Salud –publicada hoy miércoles en el Boletín Oficial– determina que los aceites de girasol ahora deberán ser identificados en dos categorías: virgen y refinado (en el primero no se permite el uso de aditivos).
En lo que respecta a la composición en ácidos grasos, el aceite de girasol ahora se clasificará en cuatro categorías. Los dos primeras corresponden a “aceite de girasol” (aquel cuyo contenido de ácido oleico sea como máximo 54,9% sobre el total de ácidos grasos) y “aceite de girasol medio oleico” (con un contenido de ácido oleico comprendido entre 55,0% y 74,9%).
Las dos restantes son “aceite de girasol alto oleico” (con un contenido de ácido oleico igual o mayor a 75,0%) y “aceite de girasol alto esteárico-alto oleico” (con un contenido de ácido oleico sea igual o mayor a 60,0% y uno de ácido esteárico sea igual o mayor a 10,0%).
El ácido oleico es un tipo de grasa monoinsaturada que ejerce una acción beneficiosa en el sistema cardiovascular al aumenta el denominado “colesterol bueno” sanguíneo. En tanto, el ácido esteárico es un tipo de grasa saturada que no aumentaría los niveles de colesterol en sangre.
La resolución conjunta 223/13 y 332/13 determina que las empresas elaboradoras de aceite de girasol cuentan con un plazo de 180 días corridos para readecuar la clasificación de los productos comercializados.
Fuente: Valor Soja