¿Cuánto queda y quién lo tiene?
Las estimaciones dan cuenta de que hay entre 1,5 y 2 millones de toneladas de trigo en manos de exportadores, molinos o acopios. Los productores aseguran que vendieron todo el cereal.
Las empresas reunidas en torno a la Cámara de Exportadores de Cereales (CEC) aseguran que están volcando al mercado interno, vía ventas a los molinos, las 2 millones de toneladas de trigo que compraron pero no pueden exportar por el cambio de timón en los permisos del Gobierno. Lo informaron en conferencia de prensa junto con la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) y representantes del sector panadero.
En la última semana, la amenaza de que el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, aplique la Ley de Abastecimiento le imprimió velocidad al comercio, y el trigo bajó de u$s 460 (el 1º de julio) a u$s 398 por tonelada el lunes, en el Mercado a Término de Buenos Aires (MatBa).
Moreno espera tener hoy toda la información de las empresas, con el paradero de las existencias de trigo al día.
Hasta el momento, se sabe que los exportadores compraron 4,9 millones de toneladas de trigo, de los cuales embarcaron ya casi el total de los poco más de 3 millones que están habilitados a exportar.
Según los permisos de ventas otorgados a cada firma, cinco empresas se repartieron la mitad de las ventas externas del cereal. Se trata de Bunge (12%), Cargill (11%), la Asociación de Cooperativas Argentinas (9,2%), ADM (9%) y Oleaginosa Moreno (8,3%). Y si se suma a Louis Dreyfus (8,1) y a Toepfer, (7,1%), las siete primeras empresas concentran el 66% de las exportaciones de trigo del país. Semanalmente, estas compañías deben presentar ante la Unidad de Coordinación y Evaluación de Subsidios al Consumo Interno (Ucesci) que reemplazó a la Oncca, una Declaración Jurada de movimientos y tenencias al momento. Por eso, algunos en el sector se sorprendieron de que Moreno les haya pedido un informe que, presumiblemente, ya tiene en su poder.
Una de las sospechas detrás del pedido de información a las empresas puede considerar que están volcando trigo a la molienda sin informar oficialmente el movimiento. De hecho, el ritmo de ese traspaso se desconoce aunque los exportadores lo dan por seguro porque, de hecho, el Gobierno se los está pidiendo.
Si bien la opinión general del mercado indica que el cereal está, algunas cuestiones pueden matizar esa aseveración que con tanta vehemencia cubrió la conferencia de prensa de los sectores exportador, molinero y panadero, el lunes en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Una es que la información del stock inicial, de entre 1 millón y 1,4 millón de toneladas, no sea correcta, y que el país haya iniciado la campaña actual con menos existencias de trigo.
Otra opción, menos probable, es que la cosecha no haya alcanzado las 9 millones de toneladas, pero las estimaciones privadas y las oficiales coincidían en ese punto.
Por último, si es cierto que existe buena parte del remanente de la producción con problemas de Fusarium, la cantidad de trigo disponible para pan realmente sería ajustada.