Algunos datos para entender la escasez de harina de trigo
Diversos especialistas analizaron por qué se produjo semejante aumento en el precio del pan en las últimas semanas.
En los últimos días se generó una fuerte controversia en todo el país a partir de los fuertes aumentos que viene registrando el precio del pan.
Desde varios sectores (panaderos, molineros, consumidores, comerciantes, etc.) dieron su versión de los hechos. Pero muchas miradas obviaron el fondo de la cuestión: el fracaso de la última cosecha de trigo.
Al respecto, Infocampo consultó a diversos especialistas en el tema para intentar explicar por qué justo en este momento se produjo una suba espectacular en el precio del trigo que derivó en fuertes aumentos en los precios del principal producto derivado de esa materia prima.
"Las necesidades de la molinería están vinculadas al uso industrial y para eso se necesitan distintos tipos de trigo. En otras palabras, la oferta es estacional y la demanda por parte de la molinería es constante", comentó Raúl Maestre, directivo de Aaprotrigo.
"El precio del trigo aumentó de manera inédita por la sencilla razón de que la producción es muy pobre", afirmó Maestre, para luego mencionar que "la situación climática en el verano fue adversa y por esto no hay ni cantidad ni calidad necesaria para un uso industrial".
Cosecha pobre
La cosecha de trigo 2012/13 fue de apenas 9,8 millones de toneladas (un 22% menos que el año pasado). Se trata, además, de la tercer menor producción de la última década por detrás de las campañas 2009/10 (con 9 millones de toneladas) y de la 2008/09 (con 8,4 millones de toneladas).
Esta escasez repercute directamente sobre la materia prima. Para tener una idea, un año atrás el valor del contrato Trigo Matba Julio 2013 era de 185 u$s/tonelada, mientras que ayer miércoles esa posición registró un precio de 470 u$s/tonelada.
De esta manera, la mayor parte de los molinos comenzaron en las últimas semanas a aumentar considerablemente el precio de la harina "000". Actualmente la bolsa de 50 kilos se consigue a un precio de $ 290, al tiempo que dos meses atrás se pagaba $ 175.
La opción de importar
Mucho se habló de la posibilidad de que el Gobierno nacional decida abrir las importaciones de trigo para lograr bajar los precios internos. Pero lo cierto es que Guillermo Moreno dio de baja esa idea al enterarse de la negociación de un molino argentino con uno uruguayo.
"Más allá de cuál sea la responsabilidad de los funcionarios oficiales, el Gobierno debería darse cuenta que importar una materia prima que escasea es una política que emplea cualquier país del mundo", señaló Gustavo López, director de la consultora Agritrend.
Por su parte, fuentes del sector exportador se manifestaron al respecto: "La importación de trigo podría causar una pérdida del precio interno de u$s 150 por tonelada", alertaron. "Más de dos millones de toneladas siguen en manos de los productores que son quienes, en definitiva, deciden si venden o no. El sector exportador tiene existencias mínimas libres de Registros de Exportación", aclararon.
En tanto, según datos oficiales, en los primeros cinco meses del año se declararon exportaciones de harina de trigo por casi 93.677 toneladas (una cifra equivalente al 31% del cupo de 300.000 toneladas habilitado por el Gobierno para 2013).
En mayo pasado se registraron ventas externas del producto por 33.047 toneladas a un valor promedio ponderado de 533 u$s/tonelada versus 376 u$s/tonelada en el mismo mes de 2012 (+41,7%). Los principales destinos de exportación en enero-mayo de 2013 fueron Brasil y Bolivia con el 82,1% y 14,1% del volumen declarado en el período respectivamente.
Mercado intervenido
Cabe recordar que la intervención del Gobierno nacional sobre el mercado de trigo rige de hecho desde el año 2006 con el propósito, en su momento, de desacoplar los precios internacionales de los internos para no afectar "la mesa de los argentinos".
Para lograr ese propósito, entre 2007 y comienzos de 2011 la industria molinera recibió subsidios oficiales por $ 3771 millones, mientras que en ese mismo período los productores de trigo cobraron compensaciones por $ 379 millones.
Pero luego de la disolución de la Oncca, en febrero de 2011, se interrumpieron los pagos.
"Desde 2006 no hay un mercado abierto ni transparente, sino que los productores están sujeto a condiciones totalmente arbitrarias desalentando por completo la producción", dijo el analista de mercados y director de la consultora Kimei Creales Javier Buján.
"El mercado de trigo sigue mostrando una enorme distorsión por la intervención oficial y no hay esperanzas de que esto cambie porque el Gobierno está convencido que este es el camino a seguir", concluyó Buján.
Fuente: Infocampo