En busca de otro modelo de alquiler
El alquiler es uno de los costos de mayor impacto en la rentabilidad del negocio y se puede gestionar de común acuerdo con el propietario.
El momento del año en que nos encontramos hace propicio el análisis sobre la modalidad actual de los arrendamientos. El alquiler es uno de los costos de mayor impacto en la rentabilidad del negocio y se puede gestionar de común acuerdo con el propietario.
En este contexto es importante diseñar acuerdos a largo plazo para que se puedan implementar rotaciones gramíneas-leguminosas para garantizar la sustentabilidad productiva y reponer fósforo en los suelos. Hay modelos en los cuales se le asigna un valor económico base a la tierra al principio de la campaña. Permiten bajar los rendimientos de indiferencia y en función del resultado final del negocio se distribuye el margen según un porcentaje establecido para el propietario. De esta forma, el acuerdo es más equitativo. Cuando los precios y rindes son buenos y el margen está por arriba de lo esperado el propietario cobra un mejor alquiler y cuando no hay margen positivo no se incrementa el valor del mismo. Se comparte una parte del riesgo del negocio.
La inflación, el aumento de costos y el doble tipo de cambio están reduciendo drásticamente la rentabilidad del negocio para la próxima campaña. Considero importante hacer la proyección del negocio de la campaña 2013/14 con los precios futuros y el pago del arrendamiento para la próxima campaña fijado con el mercado a futuro, dado que es el precio al que se puede vender la futura cosecha. Si no hay renta económica para el hombre de campo que invierte no hay agricultura sustentable.
Fuente: La Nacion