La clave es la prevención y monitorear los lotes
El Ing. Agr. Marcelo Metzler, miembro de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA Paraná, en diálogo con Momento de Campo brindó recomendaciones para el control de malezas en un momento clave.
Avanza la cosecha de granos gruesos. Estamos con un clima favorable no solo para efectuar las labores de cosecha de soja, sino que además para realizar los controles adecuados de las malezas. Hay que volver a caminar el lote. Y el productor debe pensar en el control de las malezas junto a su asesor técnico.
Diversas fuentes arriesgan que hoy en día las malezas se llevan un 14% de los rendimientos a nivel país, lo cual en un contexto de demanda creciente de alimentos no es un número despreciable. Por lo tanto el desafío de mejorar la productividad está en la inversión en tecnología. En este marco, el Ing. Agr. Marcelo Metzler se refirió al panorama provincial en cuanto a las malezas que están emergiendo: “Hay una serie de malezas que han aparecido en los últimos tiempos, la más destacada es la rama negra, pero han aparecido otras incluso resistentes al glifosato como el sorgo de alepo y el capí, entre otras que son las más importantes”
Al ser consultado acerca de una recomendación al productor, Metzler sostuvo: “La clave es monitorear los lotes y relevar que tipo de malezas se presentan. Actualmente, aunque duela al bolsillo se aconseja un barbecho temprano, en mayo o primer quincena de junio, con herbicidas hormonales en mezcla con glifosato”. Y añadió: “Otro momento clave es la primavera, previo a la siembra de cultivos estivales, ya que es un período donde se incrementan las malezas por la temperatura”.
Acerca del control adecuado de rama negra, el especialista sostuvo: “Lo mejor es la prevención, el monitoreo, caminar los lotes, ver cómo está el flujo de la maleza, controlarlos con barbechos tempranos y con herbicidas residuales. Si se dilata el tiempo y llega octubre o diciembre, la única opción que queda y la cual no es aconsejable es el doble golpe que consiste en la aplicación de una mezcla de glifosato con un herbicida hormonal y a los 7 o 10 días hacer un tratamiento con herbicidas quemantes para evitar el rebrote que la mayoría de las malezas suelen tener cuando se las intenta controlar y están demasiado avanzadas en su desarrollo”.
Fuente: De la Redacción de Momento de Campo