Falleció Daniel Miró: un quijote moderno del sector rural
yer miércoles murió Daniel Miró a los 60 años de edad en la ciudad de Buenos Aires. Esta es, para muchos integrantes del sector agropecuario argentino, la noticia más importante del dÃa.
Daniel Miró fue un quijote moderno. Creó una consultora –Nóvitas– dedicada a brindar asesoramiento comercial a empresarios agrícolas. El problema –para él y para muchos de sus clientes– es que Daniel nunca quiso vender recetas.
Cualquier consulta sobre cómo y cuándo vender tal o cual grano podía derivar en un análisis de los más diversos factores presentes en diferentes regiones del orbe. Hizo el mayor de los esfuerzos para que pudiésemos entender que detrás de las oscilaciones de precios de los commodities agrícolas habita una enorme cantidad de fenómenos –sociales, políticos, especulativos, monetarios– que sólo pueden comprenderse al ser analizados con una miradaglobal.
Muchos no entendieron o no quisieron entender: querían la receta. Nada más. Otros, en cambio, aceptaron el desafío de Daniel y, luego de cada reunión de trabajo, se llevaban muchas más preguntas de las que habían traído.
Ese proceso intelectual fue generando empresarios con un perfil profesional que, con el transcurso del tiempo, se fue alejando cada vez más del típico productor terrateniente. Esos empresarios –entre las muchas cosas que hicieron– transformaron la matriz productiva de diversas regiones uruguayas, paraguayas y bolivianas al encontrar en esas naciones oportunidades que no estaban presentes en su propio país de origen. Y algunos hasta se animaron a invertir en Brasil (nación que se encamina a ser el granero del mundo del presente siglo).
El conocimiento es un factor intangible que a veces es difícil de cuantificar. Pero probablemente nos llevaríamos una enorme sorpresa si pudiésemos medir el valor generado por el trabajo de aquellos profesionales encargados de hacer que otros visualicen la posibilidad de concretar algo que aún no existe.