Frigoríficos denuncian abuso de las ART
Algunas empresas debieron afrontar incrementos que oscilan entre el 400% y el 600%, sumas que -afirman- resultan impagables. La Superintendencia de Riesgos de Trabajo de la Nación no da respuestas al sector.
El precio de las prestaciones de las Aseguradoras de Riesgo de Trabajo (ART) -luego de sancionada la reforma de la Ley 26.773)- “pone en peligro la ecuación económica de la Industria Frigorífica que, de por sí, no se encuentra en su mejor momento”, indicaron mediante un comunicado conjunto las cámaras que agrupan a los frigoríficos argentinos.
La “multiplicación inusitada del precio que las ART pretenden cobrar” por el seguro de riesgos del trabajo, indicaron, “pone al borde del ‘knock out’ a la industria, que no puede pagar esos incrementos y hasta el momento no obtiene respuesta de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo de la Nación”.
El parte afirma que la problemática es “muy grave” y pone en serio riesgo la continuidad de la explotación de los frigoríficos, lo que podría redundar en despidos masivos. “Este aumento desmesurado pone en evidencia otra falencia del sistema por el cual las empresas se encuentran cautivas de las Aseguradoras, que les comunican aumentos (que por ley no pueden discutir sino aceptar), y al pedir cotización en otras Aseguradoras (que tienen la obligación legal de hacerlo), éstas se eximen cotizando las alícuotas máximas que tienen pre-aprobadas por parte de la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN), que de hecho se constituye en un rechazo, puesto que las aseguradoras se resisten a aceptar a determinadas actividades, por su siniestralidad”.
Asimismo, debido a que las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo no pueden rechazar directamente a empresas, los frigoríficos denunciaron que en existe una verdadera “cartelización” entre las compañías, dado que al solicitar nuevas cotizaciones muchas no lo hacen o pasan alícuotas superiores al incremento.
“Con la actual situación es indudable que las Aseguradoras están trasladando todo el peso de la modificación a la Ley y el riesgo a las industrias, asumiendo previsiones que resultan muy onerosas al sector productivo, constituyéndose en un efecto seguramente no deseado por el espíritu de la Reforma”, dispararon las cámaras.
Por último, resaltaron que para el sector, “vapuleado por las crisis, con el cierre de más de 120 empresas en los últimos dos años”, este nuevo aumento le resta competitividad y precariza la situación de trabajadores y empleadores.
De no modificarse esta situación, las cámaras que nuclean a los frigoríficos prevén un “quebranto generalizado”.
La exportación no ayuda
Según el último reporte de la Cámara de la Industria y Comercio de Carne (CICCRA), las ventas al exterior de carnes procesadas alcanzaron un total de 8.455 tn pp (toneladas peso producto) en 2012 y retrocedieron 53,1% en términos interanuales. Su participación en el total disminuyó de 6,9% a 3,9%. En relación al mismo período de 2005 acumularon una baja de 83,3%.
Los ingresos totales por las exportaciones de carne vacuna ascendieron a US$ 977,1 millones en 2012, los que resultaron 22,9% inferiores a los registrados en 2011. Se destaca, además, que los ingresos totales por estas exportaciones cayeron 24,5% con relación a 2005. La facturación por embarques de menudencias y vísceras ascendió a US$ 213,0 millones y resultó 5,6% inferior a la alcanzada en 2011.
Fuente: Mundo Campo