El pulso seco presiona a la soja
El Sistema de Información de Bolsa de Cereales de Entre RÃÂos publicó en su informe semanal un reporte exclusivo de la Consultora Climatológica Aplicada (CCA) sobre el pulso seco que presiona al cultivo de soja.
Según la CCA, las perspectivas de corto plazo no permiten avizorar una pronta recuperación. Más allá de lluvias ocasionales que puedan darse en escala reducida el patrón atmosférico conducente proyecta el afianzamiento del pulso seco hasta entrada la segunda década del mes. La zona núcleo sojera tiene muy bajas chances de recibir las precipitaciones necesarias como para que las reservas vuelvan a valores normales. Para gran parte del centro sur de Santa Fe, este de Córdoba, sudoeste de Entre Ríos, norte de La Pampa y norte de Buenos Aires, es necesario un piso de 80 milímetros en las próximas dos semanas. Este volumen de agua no lo muestran los pronósticos, por lo tanto hay que trabajar sobre la idea de que arribaremos al 25 de enero con reservas por debajo de los valores normales.
A su vez, la CCA realizó una simulación de corto plazo donde sostiene: "Partiendo de las condiciones actuales de humedad y teniendo en cuenta una semana sin precipitaciones como es consensuado por la mayoría de los modelos, podemos simular cual es el estado de reservas para una pradera. No debe tenerse en cuenta el resultado para aquellas zonas que han permanecido anegadas".
El informe dice que hoy en día, el estado de los cultivos en la mayor parte de las sementeras aún no acusan el impacto del retroceso en la oferta de agua, las reservas han permitido sobrellevar la situación. El panorama se ajusta significativamente hacia el viernes próximo y el mismo permite plantear la posibilidad de que la soja en algunos sectores de la zona núcleo comience a padecer estrés hídrico. Por esto decimos que la entrada a la última década de enero, puede ser decisiva para las sojas más adelantadas en su floración. De no mejorar la oferta de agua, estas entrarán en sequía a lo sumo en la semana del 25.
Perspectivas para febrero
Según afirma la CCA, el comienzo de este año se asemeja al comienzo del año pasado. La diferencia básica es una mejor disponibilidad de reservas a partir de las lluvias que dejó diciembre. Sin embargo y más allá del manejo y las buenas prácticas el escenario es dificultoso. Por lo pronto no se avizora una salida rápida de este pulso seco. La solución sobrevendría en la última semana de enero o en la transición a febrero. Trabajando sobre esta hipótesis cada productor podrá plantear su escenario piso para rendimientos.
Por lo pronto las sojas que más temprano ingresen a floración padecerán con mayor rigor este pulso seco. Insistimos en que los cálculos de balance hídrico no pueden simular los manejos agronómicos que favorecen la conservación del agua, sin embargo queda claro que cualquier tipo de cultivo acusa algún tipo de impacto luego de transitar un mes sin recibir precipitaciones.
La situación es problemática, hacia el sudeste de Buenos Aires el panorama parece más aliviado, pero de todos modos cuando se analiza la gran escala es difícil validar estimaciones del orden de los 55 millones de toneladas. Este viraje en el comportamiento pluvial se va a llevar algunos quintales. La campaña no se ha cerrado ni para bien ni para mal. La actualidad no es favorable, el pronóstico de corto plazo tampoco, sin embargo la transición intermensual puede traer las soluciones que todos esperan.