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Radicado en Irazusta hace más de 20 años, el productor Matías Márquez trabaja en la Cabaña “Don Alberto” de la raza ovina Hampshire Down.
Lo acompaña en las tareas diarias su esposa, mientras que sus pequeños hijos colaboran en tareas menores.Matías nació en Campana, ciudad donde trabajó hasta los 20 años. Luego emigró al sur entrerriano donde recaló en la pequeña localidad rural de Irazusta. Prestó servicios agrícolas, entre otras tareas, pero finalmente se inclinó por la crianza de reproductores ovinos en un predio de 8 hectáreas.
En el galpón donde tiene a sus ejemplares más valiosos, Matías hizo un alto en sus tareas diarias para charlar con ElDía. Explicó que se le denomina cabaña al establecimiento que “hace pedigree”, y que prepara animales en un “lugar cubierto y dividido en corrales que cuentan con un buen piso”; mientras que la majada se “encuentra al aire libre, pastando en el campo con sus crías”, detalló.
Su esposa, Érica, además de realizar las tareas de la casa lo ayuda en los trabajos de la cabaña; mientras que los chicos se ocupan de arrear las ovejas a los corrales y otras tareas menores.
Un trabajo que se ve reflejado en las exposiciones, con la presencia de toda la familia atendien do los ejemplares en el sector de corrales.
Próximo a cumplir 20 años con la cabaña, Matías recordó los inicios destacando que “fue muy humilde con tres ovejas pedigree y un carnero”. Luego me “inscribí como criador en la Sociedad Rural Argentina que es la que lleva los registros genealógicos, paso fundamental para empezar como cabañero”.
En ese mismo año de inicio, compramos “cuatro ejemplares más”, para, el año siguiente, adquirir “diez hembras más”.
Después, año a año, todas las hembras que nacían quedaban en la cabaña a los fines de ir “seleccionando y agrandando la majada hasta lo que es hoy”. Señaló que “costó mucho, pero fue un trabajo que valió la pena”.
Indicó que “producto del esfuerzo”, los “frutos no tardaron en llegar”, con grandes campeones en las exposiciones rurales de Gualeguaychú, Concordia y Villaguay. Destacó que el logro grande llegó, cuando empezamos a ir a la “Exposición de Palermo”, para competir contra los mejores ejemplares del país. Una tarea “titánica” para una pequeña cabaña de una localidad rural, que se planteó otra meta que fue la de concurrir a las nacionales “Hampshire Down”, a bordo de una modesta camioneta que lleva un tráiler con los ejemplares.
El primer paso, en Palermo, fue en el 2014; mientras que un año después incursionó en la primera nacional de la raza.
Dijo que la cabaña, en Palermo, alcanzó “premios importantes, como el campeonato ovejas, el tercer mejor macho, y la tercer mejor hembra de la raza, además de ganar, dos años consecutivo, la mejor cabeza de la raza”.
El ganado ovino
Opinó que se trata de una “producción que no para de crecer”, aunque faltan “muchas cosas para que se termine de consolidar como la comercialización y plantas de faena”.
Indicó que la gente, más allá del momento económico, se ha “dado cuenta de que el ovino, bajo cualquier circunstancia, es redituable”, debido a que se “trata de un animal noble que tiene muy buenos rindes en el gancho”. Acotó, en lo que refiere a carga animal, que donde come una vaca, lo “hacen diez ovejas”. Es así que una explotación ovejera se puede llevar adelante en “campos marginales y en pequeñas extensiones de superficie”.
Aseguró que en kilos por hectárea, los rindes del cordero son superiores a los de “un bovino”.
Perros cimarrones
Un problema de nunca acabar en pequeños poblados rurales y en el campo. Matías, antes de la última edición de Palermo, sufrió el ataque de una jauría que mató a varias ovejas ocasionando a la cabaña un perjuicio económico que rondó los 150.000 pesos.
La obra esperada
Finalmente el cabañero se refirió a las obras de asfaltado, en el camino que une Larroque con Irazusta, destacando que “nos aportará muchas soluciones, cómo la de no quedar más incomunicados en caso de precipitaciones intensas”. Si bien falta un pequeño tramo indicó que “el grueso de la obra está culminada”, y solo “resta esperar un tiempo más para la culminación”.
Fuente: El Dia