Por los altos costos, el precio del maÃz no serÃa rentable
A pesar de que se alcanzan altas productividades en el maÃÂz con los adelantos tecnológicos, la rentabilidad, sin embargo, no es la adecuada y ahora desde el campo piden que eliminen las retenciones del cultivo que son del 20%.
Con un agro que en la actualidad se define como falto de competitividad, las retenciones molestan tanto en el trigo como en la soja, porque el Estado, según varios analistas económicos, se lleva gran parte de la renta del sector.
La última voz que se escuchó correspondió al presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, quien aseguró que "con los actuales costos y el valor de los fletes los precios del maíz no son rentables".
Según publicó Ámbito Financiero, durante los últimos días no hubo muchas operaciones de comercialización; más bien fueron escasas en el mercado disponible o de entrega cercana que rondó los $ 900 la tonelada en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
El último informe de oferta y demanda del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) produjo, según el economista de la BCR, Leonel Calleia, un "retraimiento" en las operaciones maiceras.
"Los valores locales no lograron ser atractivos para los compradores y se sucedieron muy pocas operaciones sumado a que la producción de Estados Unidos que se espera para esta campaña 2013-2014 es muy abundante", dijo.
Según el USDA, la Argentina producirá 26,5 millones de toneladas de maíz. En tanto, el Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires prevé 24,8 millones de toneladas, volumen que se ubicaría un 15,4% por encima de lo recolectado la pasada campaña 2011-2012 que fue de 21,5 millones de toneladas.
El uso del maíz se multiplica en las agroindustrias más que cualquier otro cereal, y así la organización MAIZAR consideró que en un período de diez años la Argentina podría producir 80 millones de toneladas de maíz y sorgo, y multiplicar por cinco el valor de las exportaciones de las cadenas de valor de estos granos.
Para que esto suceda, el maíz debe ser atractivo para los productores, es decir, rentable, más allá de la necesidad de rotar los campos y cortar con el monocultivo de la soja.
"El valor actual de mercado del maíz no resiste las retenciones del 20%", aseguró Etchevehere. Y agregó: "La enorme suba de los costos y de los fletes como resultado de la inflación desincentivan la siembra del cereal, así como la persistencia del Gobierno en mantener los cupos de exportación que deprimen el precio interno para el productor".
"De esta forma, el Gobierno atenta contra el cuidado de los suelos, ya que el maíz es un cultivo esencial para la rotación y para una agricultura sustentable; y beneficia, a través de los cupos de exportación del cereal, a algunos eslabones de la cadena que obtienen el grano a menor precio que sus competidores en otros países a costa de los productores", expresó el dirigente.
Luego de preguntarse por qué no se paga el precio lleno del maíz a los productores por parte de las industrias, recordó que, desde 2006 los productores de maíz transfirieron dos mil millones de dólares a otros eslabones de la cadena.
"Para que no pase con el maíz lo que ya pasó con la carne y lo que está pasando con el trigo, resulta indispensable poner fin a las retenciones, al intervencionismo y a los Registros de Operaciones de Exportación (ROES), reducir la presión impositiva y controlar la inflación", abogó, un cambio de "modelo" en definitiva.