Basándose en la denuncia, la maniobra generó un efecto negativo sobre la base imponible y la fuga de divisas. La Aduana asegura que las maniobras se realizaron bajo una triangulación indebida. La ruta consistía en importar soja de forma directa desde Paraguay. Sin embargo, señala, que hubo refacturaciones de intermediarios radicados en otros países.
Triangulación de soja
La Aduana citó un caso concreto donde expuso que la mercadería se trasladó directamente desde Paraguay a Argentina. Por otra vía, la facturación se registró a través de una exportación de Paraguay a Suiza a un valor de US$ 473,88 la tonelada.
Luego, desde el país europeo a la Argentina por un valor de US$ 625,60. “Hubo una sobrefacturación del 32,02 %”, denunció la Aduana.
Al mismo tiempo, el órgano de control planteó por qué no realizar la compra de manera directa. “Se presume que el verdadero objetivo de la maniobra es fugar al exterior divisas obtenidas a valor oficial. En total hay más de 3000 operaciones bajo análisis”, planteó Aduana.
En este sentido, la investigación arrojó que, bajo el régimen de importaciones temporales, el valor del insumo importado se deduce de los eventuales derechos de exportación del producto elaborado en la Argentina. “La sobrefacturación de las importaciones les permitió a las empresas investigadas deducir casi US$ 4 millones más de lo que correspondía”, concluyó la Aduana.