La sequía también pegó en las economías regionales
La CAME advirtió que la sequía y otros fenómenos climáticos como heladas y granizo hicieron estragos en los campos del país.
Las economías regionales sufrieron en todo el interior productivo con crudeza los embates del clima durante los últimos seis meses.
Las regiones fueron afectadas por la persistente tercera sequía consecutiva, y por otros eventos climáticos como heladas tardías y granizo.
La seca, además de la fuerte merma en los rindes, provocó pérdida de producción, a la vez que redujo drásticamente la calidad de los alimentos.
El impacto también se trasladó a las góndolas y verdulerías, provocando subas en los precios, como en la lechuga, tomates o frutas de estación.
Así lo indicó un detallado informe presentado en exclusiva a Infobae por Pablo Vernengo, director ejecutivo de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Vernengo reconoció que los efectos de la seca aún seguirán afectando a la producción sectorial en las distintas provincias y en los cordones frutihortícolas ubicados en torno a grandes ciudades como la de Buenos Aires, Córdoba y Rosario.
“Va a haber producción, tales como la lechuga, que se irá a precios considerables, ya que se ha quemado mucha producción de hoja verde, y deberá traerse de lugares más distantes como Mendoza. Habrá que esperar cerca de 20 días para observar una recuperación. La opción será ir a productos alternativos como rúcula o radicheta para no pagar precios exorbitantes”, reconoció.
Pero el serio impacto que tiene el clima extremadamente seco, se constata en todo el interior productivo, con pérdidas provincia por provincia. Ninguna se salvó de la falta de lluvias, ni tampoco de otros efectos como granizadas y heladas, que tuvo su efecto negativo sobre el número y calidad de la producción generada.
Según consignó Vernengo, “en las economías regionales, se registraron tres efectos muy marcados y que tuvieron una consecuencia negativa para el desempeño presente y futuro que tendrán varias actividades de cultivos y producción agrícola que se desarrollan en el interior productivo”.
En Río Negro y Neuquén, se registraron heladas tardías del 31 de octubre al 1º de noviembre, que afectaron mucho a la producción frutihortícola en muchos departamentos del Alto Valle, donde se registró “un gran golpe a los frutales”. Luego las fincas tuvieron “serios problemas con la caída de granizo” que provocó una gran pérdida productiva en momentos en que florecían las plantas.
En Santa Cruz, se verificaron heladas tardías que afectaron seriamente a la producción de cerezas, con una merma del 30%, con mayor incidencia sobre el departamento de Los Antiguos. Se está notando ahora cuando se está levantando la cosecha de esta fruta fina. En Neuquén y Río Negro, hubo heladas tardías que perjudicaron al sector frutihortícola y también forrajeras. Hubo caída de granizo, sobre todo en los departamentos de General Roca, Avellaneda y Fernández Oro y eso derivó en una merma considerable en la fruta de pepita, con una caída estimada en 30 al 40%, junto a una pérdida de calidad significativa.
Fuente: Noticias AgroPecuarias