Altos costos y sequía afectan a muchas economías regionales
El informe que elabora Coninagro de manera mensual muestra que hay 11 de 19 sectores en crisis. Y otros cuatro que ya encienden señales de alerta amarilla.
La Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) difundió su tradicional “semáforo” mensual de las economías regionales, en el que advierte que cada vez más sectores productivos están en “rojo”.
“Compleja situación en las economías regionales: altos costos y sequía”, se titula el informe con los datos relevados durante octubre y en el que “se destacan, una vez más, los costos crecientes en mano de obra, insumos y la baja demanda local e internacional”, señala Coninagro.
Sin embargo, subraya que el otro factor que pone en jaque a las economías regionales es la falta de agua, que impacta en las perspectivas de producción hacia el futuro.
“Las producciones regionales no logran aprovechar el aumento de precios en góndolas de sus productos por la suba de costos de sus insumos y de mano de obra; y por la baja perspectiva de producción que causa la terrible sequía actual”, indica el reporte.
Al entrar en el análisis sectorial, Coninagro cita como primer ejemplo a la mandioca que “atraviesa una situación complicada en el comienzo de un nuevo ciclo productivo, que se vio afectado por lo sanitario”.
El consejero de la entidad en Misiones, Manfredo Seifert, explicó que “la falta de fécula de mandioca en el mercado afecta y se debe a que tuvimos dos años consecutivos con pérdidas de producción por la sequía, y esto trajo aparejado una baja producción en este ciclo”.
“La consecuencia de todo esto es que el material que se guardó como semilla tuvo una mala calidad por cuestiones sanitarias. Esto repercutió en este año, en una gran cantidad de pérdidas de plantas, lo que pone en riesgo al mercado ya que queda desabastecido”, agregó.
Peor aún es el contexto que enfrentan los productores de peras y manzanas del sur del país, fundamentalmente debido a los problemas climáticos, como las heladas y el granizo.
T ambién mencionó la falta de financiamiento para incorporación de tecnología accesible a los productores, en cuanto a tasas razonables, plazos de pago y garantías que se le exige al productor.
Además, añadió: “Falta mano de obra capacitada para las labores culturales, sumado al alto costo laboral que tiene que afrontar el productor”.
Por último, la soja y el maíz son las producciones que más están sufriendo la fuerte sequía y a su vez también padecen los precios empujados por el “dólar soja”.
En este sentido Georges Breitschmitt, Consejero Bonaerense de Coninagro, expresó: “Venimos de tres años de sequía y este año se ha intensificado. Las reservas hídricas están bajas y dificultan una cosecha fina. Las estimaciones brindadas dan por debajo a los 20 millones de toneladas cosechadas el año pasado, ahora se habla de 15 o 12 millones de toneladas”.
“A esto se le suma que no se está sembrando en fechas óptimas, con los agravantes de siempre que no ayudan al productor como el alza de costos, el diferencial cambiario y demás”, comentó.
Fuente: Infocampo