La falta de agua multiplicó los ataques de pulgón amarillo
Asociado a la sequía, si al pulgón amarillo en sorgo no se lo frena a tiempo, los daños pueden ser del 100% del cultivo, por lo que es implrescindible el monitoreo de los lotes.
Hay que realizar controles químicos cuando el 20% de las plantas presenten 50 o más pulgones por hoja en etapa vegetativa. Las lluvias de los últimos siete días han aportado a disminuir la cantidad de ataques, pero el alerta persiste ante el escenario meteorológico de sequía.
Si bien desde hace ya varios meses se viene alertando sobre la presencia de pulgón amarillo en sorgo (Melanaphis sacchari) ya que la plaga venía atacando en el NEA y NOA, ahora ya lo hace en la región agrícola núcleo.
El pulgón amarillo en sorgo está causando daños severos en una zona donde no se lo conoce mucho, por lo que profesionales del INTA recomiendan un monitoreo permanente del cultivo.
Siguiendo esa fuente, dijo que también comentan que es una de las plagas más dañinas para el sorgo debido a que se alimenta de la savia.
Desde las agronomías advierten que hay que realizar controles químicos cuando el 20% de las plantas presenten 50 o más pulgones por hoja en etapa vegetativa, y cuando el 30% de las plantas presenten 50 o más pulgones por hojas en etapa reproductiva.
A comienzos de enero, desde la Bolsa de Cereales reportaron que el área sembrada con sorgo en esa provincia se ubicaría cercana a las 118.000 hectáreas y que, mientras a mediados de diciembre el 97% de la superficie contaba con una condición dentro del rango de buena a muy buena, en tres semanas se detectó una caída del 58%.
Según el reporte, las principales causas del deterioro de la condición del cereal se asocian a estrés hídrico, generado por la sequía, y daños por el pulgón amarillo, que en muchos lotes ya lleva dos o más aplicaciones.
En ese sentido, en relación a la aplicación de insecticidas, destacaron inconvenientes registrados en los controles, debido a las elevadas temperaturas y la baja humedad relativa ambiente.