Cadena agroforestal opera entre 30 y 40% de su capacidad
Entre Ríos cuenta con unos 179 aserraderos para la construcción, con un promedio de 14 empleados por aserradero, pero durante la primera parte de la cuarentena unos 1.700 trabajadores (68%) se vieron afectados sin poder trabajar.
La actividad forestal y la cadena foresto industrial de Entre Ríos posee "escasa demanda" y trabaja a un 30 y 40% de su potencial debido a la emergencia decretada para evitar contagios de coronavirus, informó hoy el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) con sede en Concordia.
Si bien la actividad estuvo exceptuada desde el inicio de la cuarentena, sólo en el marco de la producción agropecuaria, "la demanda es fuertemente dependiente de la actividad industrial", indicó el organismo en un informe.
Las producciones de postes, resinas, energía, madera y muebles de Entre Ríos debieron cesar su actividad al no encontrarse dentro de las actividades exceptuadas en el inicio de la cuarentena, habilitadas luego el 2 de abril.
Entre Ríos cuenta con unos 179 aserraderos para la construcción, con un promedio de 14 empleados por aserradero, pero durante la primera parte de la cuarentena unos 1.700 trabajadores (68%) se vieron afectados sin poder trabajar, detalló el INTA.
Además, "el desconocimiento del alcance" de la norma nacional que habilitaba la actividad y "los diferentes criterios de interpretación municipales y de autoridades de control" generaron inconvenientes "en la logística de personal, madera y productos".
También "se dificulta el mantenimiento de maquinarias forestales y de la industria" debido a la falta de servicios e insumos importados.
Por eso, la mayoría de los aserraderos e industrias proveedoras de insumos para la construcción y del mueble retomó la actividad pero "con escasa demanda y trabajando al 30 o 40% de su potencial", resaltó el organismo.
Por otro lado, el informe asegura que "es difícil de estimar los impactos negativos" que provocará la pandemia en el sector.
"Falta de ingresos; pérdida de clientes; limitada actividad bancaria; dificultades de logística por la disparidad en la implementación de controles en municipios; y diferentes niveles de reactivación de las economías regionales", son las causas de la crisis del sector.
La cadena foresto industrial entrerriana cuenta con tres plantas de tableros, cerca de 180 aserraderos, 50 fabricas de muebles, 15 plantas impregnadoras, una planta de resinas y una de pellets.
La provincia no posee plantas para producción de celulosa y papel, pero sí se provee de materia prima para la construcción y energía y a plantas de impregnación, entre otras, de otros distritos.
Entre Ríos ocupa el tercer lugar a nivel nacional en cuanto a superficie de bosques cultivados, con 150.797 hectáreas (11,5% del total nacional), principalmente ubicadas sobre las costas del rio Uruguay.
Fuente: CHACRA