Trigo: alerta por riesgo de fusariosis de la espiga
El INTA Paraná señaló que están dadas las condiciones para que se desarrolle esta enfermedad. Además, aseguraron que el monitoreo es fundamental para un cultivo de alta producción.
Las lluvias que se dieron en el último fin de semana y las lloviznas presentes en la región de Entre Ríos generaron las condiciones para la enfermedad fusariosis de la espiga. Para que esta enfermedad sea propensa a estar presente, también se dio el estado de desarrollo con las anteras expuestas, humedad mayor al 90% y una temperatura entre 15°C y 30°C.
La estación experimental Paraná sostuvo que los cultivos de trigo en Entre Ríos, se encuentran en diversos estadios fenológicos por retrasos en la fecha de siembra, principalmente entre embuche hinchado y fin de antesis. Además, algunos cultivos están llenando granos, por este motivo es que hay riesgo de fusariosis de la espiga.
En este sentido, el boletín fitopatológico destaca que las flores del trigo pueden estar abiertas entre 8 y 60 minutos según variedades y condiciones climáticas. Además, el estigma puede permanecer receptivo para el polen (o ascosporas – conidios de Fusarium) entre 6 y 13 días, mientras que el polen es viable sólo por 15 a 30 minutos.
La principal fuente de inóculo es el rastrojo de maíz, trigo, sorgo y soja (ascosporas en peritecios de Giberella zeae). Ante esta situación, cabe destacar que las primeras espiguillas florecen generalmente en el tercio central de la espiga y la floración progresa rápidamente hacia la parte superior de la espiga y más lentamente hacia la base.
Esta situación de fusariosis de la espiga es una enfermedad de difícil manejo. “El monitoreo de las enfermedades es una de las bases de un trigo de alta producción”, argumentaron desde el INTA Paraná.
Fuente: Agrofy News