Proteccionistas de Entre Ríos quieren prohibir las jineteadas
Dicen que se “maltrata y lastima” a los animales. Los dueños de las tropillas aseguran que siempre se cuida a los caballos porque ese es su trabajo y es “raro” que alguno se lastime.
Organizaciones proteccionistas de Concordia y de diferentes localidades de la provincia quieren prohibir las jineteadas porque consideran que en ellas se maltrata y lastima a los animales. Hubo dos denuncias realizadas al momento en Concordia de parte de Conciencia Animal Entre Ríos y según dijo a UNO el coordinador de la organización, fueron desestimadas por los fiscales. Ahora quieren que no se autorice una jineteada prevista para el 1º de mayo en esa ciudad. Por su parte, los dueños de tropillas y organizadores de jineteadas de Entre Ríos, aseguraron a UNO que ellos siempre cuidan a los animales porque eso es parte de su trabajo y que sí habría que fijarse en cómo es el trato con los caballos de carreras.
Cierto es que la jineteada junto a sus fiestas populares son parte de la historia de la provincia. Casi no hay un fin de semana en el año en que alguna localidad o paraje de Entre Ríos no realice un espectáculo de estos. Conciencia Animal sostiene que tiene fotos y videos que muestran a los animales lastimados. Los dueños de tropillas consultados, invitan a quienes quieran, a conocer el estado de sus caballos.
Presentación judicial
Horacio Froy, coorrdinador de la organizador proteccionista, con relación a las denuncias que realizaron dijo a UNO: “En una segunda oportunidad fuimos y tomamos fotos y videos detallados. Buscamos los animales que estaban lastimados en los costados, en la cara, golpeados y en el piso”. Luego se presentaron ante la Justicia. Sostiene que el fiscal desestimó la denuncia por considerar que no había posibilidades de hacer una investigación y por sostener que no existía maltrato a los animales.
“Queremos saber por qué desestiman tan rápido las denuncias que realizamos, por lo menos queremos que se investigue”, dijo Froy. Esta organización se ampara en la ley 14.346 que castiga hasta con prisión a quienes realicen malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad a los animales.
Al momento, según confirmó Froy, se espera la realización de una jineteada en Concordia para el 1º de mayo. La organización proteccionista hará una presentación administrativa en la Municipalidad para que no autorice su realización. “En todo caso haremos una presentación judicial con un recurso de amparo par que judicialmente se prohíba”, dijo Froy.
Defender el trabajo
José Gillig es de Bovril y tiene 42 años. Es dueño de la tropilla Los Rebeldes y dijo a UNO: “Hay que mirar a los caballos de carrera. Lo tienen encerrado y se les hace un tratamiento; se los enchufa. Cada uno tiene su forma de pensar. Un caballo de doma tiene menos riesgo y todo que uno de carrera; ahí los pasan de revoluciones”.
Gillig sostiene que en las carreras de caballos realmente se maltrata a los animales y que ahí deberían de dirigir la mirada las organizaciones proteccionistas.
“En la doma, si el jinete tiene realmente las espuelas reglamentarias no se lastima a los animales. Además el caballo de doma tiene un montón de cuidados: tienen sus vacunas al día y cada dos meses viene el veterinario y saca sangre al animal para la sanidad del caballo”. Explicó que esa es la condición para poder trasladar los caballos por Entre Ríos y llegar a una jineteada.
A su vez, Gillig explicó que en la doma un jinete está menos de un minuto arriba del animal. “Tenés que andar de mala leche para que haya un jinete con la espuela trabada y que pueda cortar al animal. La yegua que tengo yo lleva 56 montas”.
Además Gillig explicó que los dueños de los caballos siempre revisan las espuelas para que las rodajas giren.
“Donde no giran, cortan. Por eso uno se asegura de que sean siempre las reglamentarias”, dijo el dueño de la tropilla y agregó: “Para que un caballo quede tirado después de una doma tiene que ser un caballo enfermo. Si se tiene un buen bozal y equipo no le pasa nada al animal”.
La polémica abierta
Están los proteccionistas quienes dicen que los animales son maltratados, que se los lastima. Además sostienen que las jineteadas son espectáculos “sangrientos y crueles”.
Por otro lado están los dueños de las tropillas y organizadores de doma: una fiesta que tiene años y tradición, sobre todo en Entre Ríos. Ellos aseguran que siempre revisan que los domadores tengan las espuelas reglamentarias porque si el caballo se lastima se pone en juego su trabajo.
Los primeros quieren que se termine con todas las jineteadas y aseguran tener fotos y videos. Los segundos dan cuenta de que se cuida a los animales con todos los requisitos.
La fiesta de la doma tiene historia y tradición popular
La jineteada es tan antigua como la colonización. La doma de caballos requirió siempre de la habilidad y el coraje del hombre de campo. Con el paso del tiempo el trabajo cotidiano se transformó en espectáculo folclórico que en la provincia de Entre Ríos es una tradición.
Raúl Velázquez es dueño de la tropilla La Entrerriana. Es de Gualeguay y tiene 70 años. Hace 50 que trabaja con los caballos. “Hay que saber andar con los animales. Si no se cuida el animal no se cuida el trabajo de uno. Es muy raro que se los lastime. Antes con el asunto de las espuelas si, pero ahora no”, dijo a UNO Velázquez.
Oriundo de Gualeguay dijo: “Antes se estropeaban por las espuelas, pero ahora no es más así. Ahora no lo cortan al caballo y siempre se revisa”.
Fiesta popular
Siempre la doma, en la actualidad, tiene el carácter de una fiesta popular. El jinete monta al animal y si tiene destreza y habilidad, a lo sumo se mantiene un minuto. En cada fiesta, la música, el payador y las comidas típicas de cada zona se entremezclan. Velázquez dedicó gran parte de su vida a los caballos, sobre todo en jineteadas para las escuelas rurales o iglesias y capillas.
La situación de los más pobres del campo lo llevó a tomar decisiones para trabajar con los sectores que más necesitaban ayuda. “Son casi siempre para recaudar fondos. Las escuelas del campo dan lástimas. Hay otros que hacen las fiestas para el bolsillo, pero nosotros hacemos para beneficios sociales”.
En coincidencia con otros dueños de tropillas, sobre la intención de prohibir las jineteadas, dijo: “Al Hipódromo tendrían que ir a fijarse. Eso es lo más bravo. Ahí caen muertos los animales después de las carreras. En la jineteada son pocos segundos los que se está arriba del caballo”.
Uno Entre Ríos